Domingos

AMORRELATOS CORTOS

Daniela Cademartori

Domingo 17

Pedro llegó temprano con cajas desarmadas bajo el brazo. Guardó lo que faltaba: ollas, vasos y platos,

cuatro libros, un velador sin foco y el pijama. Le pedí que deje las llaves en la mesa. Calambres en todo el cuerpo, necesitaba que termine, que se vaya. No podía dejar de llorar. Me abrazó. Siempre tan cálido, pero tan pelotudo también.

Domingo 24

Dormí hasta tarde. Fui a comer a lo de mi amigo Joaquín, llevé un mouse de chocolate. Me enojé porque me cuestionó la separación. Volví a casa a limpiar cantando Gilda.

Imagino que Pedro fue a lo de su mamá y hablaron pestes de mi porque la vieja nunca me quiso. Igual casi

que ni pensé en eso. Estoy bien y no quiero saber de él.

Domingo 31

Hice un trekking para armonizar con la naturaleza pero en realidad conecto con gente cuanto menos

extraña: Carlos se frenaba cada 6 pasos a levantar algo inexistente. A Luisa le hablabas pero no te contestaba.

Lucía comió caramelos sin parar en las dos horas.

Juancho, el guía, desbordado con la organización; éramos cinco personas con él incluido. Casi que no

pensé en P.

Domingo 7

Me explotaba la cabeza. Me dolía tanto que mantener los ojos abiertos era un sacrificio. 10.40 llamó Pedro.

Falleció la vieja, perdón la madre. Un infarto. Tarde y noche de velorio. Que suplicio. Charlas,

llantos, entendimiento, desacuerdos, decisiones. Agarrados de la mano todo ese tiempo. Retener. Sostener.

Domingo 14

Pasamos el día en su casa del campo. Quiso buscar unas pertenencias de la vieja así tiene las cosas de ella

en un solo lugar. El naranja del atardecer nos encontró abrazados y risueños; tiempo amoroso, distinto, con complicidad y apego.

Domingo 28

Parafraseando a Charly, me entregó un papel manuscrito:

“Necesito alguien que me abrace un poco

mientras limpio mi cabeza.

Que me quiera cuando estoy, cuando me voy,

cuando me fui.

Que cebe mates, me bese después

y echemos a reír.

Que no le importe la ropa si total

nos vamos a desvestir

para amarnos.

Sos ese alguien así, yo te lo pido

que me avises porque si es así totalmente

¿Sos quién necesito?”

Lo miré y  asentí con la cabeza.

Si tenes dudas o comentarios, contáctame